Los deportistas son los miembros más sanos de nuestra sociedad y tienen mucho menor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, algunos cánceres, diabetes y demencia que las personas de misma edad que no practican deporte. Ello se debe a que la práctica del ejercicio físico de modo frecuente disminuye notablemente el riesgo de sufrir muchas enfermedades.
Los deportistas son los miembros más sanos de nuestra sociedad y tienen mucho menor riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares, algunos cánceres, diabetes y demencia que las personas de misma edad que no practican deporte. Ello se debe a que la práctica del ejercicio físico de modo frecuente disminuye notablemente el riesgo de sufrir muchas enfermedades.
Aunque los beneficios de la práctica del ejercicio físico superan abrumadoramente los riesgos que conlleva, puede ocurrir, aunque muy raramente, que algunos deportistas tengan un problema cardiaco o, incluso, mueran de forma repentina e inesperada durante la práctica deportiva o en la hora posterior a la misma. La mayoría de estas muertes súbitas se producen por problemas del corazón. Aunque el riesgo de que se produzcan estas muertes súbitas en deportistas de competición es muy bajo, desde hace años se está estudiando cuál es el modo más apropiado y eficaz para detectar y tratar a las personas con más riesgo de tener una muerte súbita durante la competición.
Aunque no existe una unanimidad en todos los aspectos, basándose en las recomendaciones de las principales Sociedades Científicas Internacionales, se recomiendan tres líneas de actuación para intentar detectar a una parte de los deportistas que tienen riesgo de sufrir un accidente cardiaco o muerte súbita durante el ejercicio:
1) La más sencilla, aunque incompleta, consiste en responder a un cuestionario de signos y síntomas de sospecha. El cuestionario que recomendamos es el cuestionario de signos y síntomas de sospecha que ha sido elaborado por el Comité Médico Asesor de la Carrera Behobia-San Sebastián, con el que ha colaborado el CEIMD. Este cuestionario se puede descargar aquí y ha tenido en cuenta las recomendaciones dadas sobre el mismo por las Sociedades Científicas indicadas anteriormente. El cuestionario debe ser respondido con respuestas "SÍ/NO" por cualquier deportista, sin necesidad de ir al médico. Si se contesta con algún "SÍ" al cuestionario de signos y síntomas (preguntas 3 a 13), todas las Sociedades Científicas recomiendan que el deportista visite al médico del deporte o al cardiólogo para que le haga un reconocimiento médico. Los signos y síntomas indicados en el cuestionario también deben tenerse en cuenta durante el entrenamiento o la competición porque, en el caso de que aparezcan, lo aconsejable es pararse y consultar con un médico.
2) La segunda línea de actuación, más completa y recomendable, es pasar un reconocimiento médico que incluya los siguientes apartados: a) El cuestionario del punto anterior o uno algo más completo, b) un examen físico sencillo (que debe incluir auscultación cardiopulmonar y medida de tensión arterial), y c) un electrocardiograma (ECG) de reposo. El interés o no de hacer un ECG de reposo es un tema controvertido porque las principales sociedades científicas europeas lo recomiendan mientras que las principales sociedades norteamericanas no lo recomiendan.
3) La tercera línea de actuación es con los deportistas de nivel que tienen unas altas exigencias durante el entrenamiento y competición. A esos deportistas, además del reconocimiento citado, se les añade una prueba de esfuerzo hasta el agotamiento y un ecocardiograma. Ello se debe a que, debido al elevado grado de exigencia, los deportistas de alto nivel tienen tendencia a presentar arritmias cardiacas y alteraciones en el Electrocardiograma de reposo que pueden confundirse con problemas cardiacos. Además, el test de esfuerzo permite conocer la condición física del deportista y le ayuda a prescribir y controlar mejor los esfuerzos de su entrenamiento. En Navarra, los deportistas de los centros de tecnificación tienen obligación de pasar un reconocimiento médico de este tipo en los locales del CEIMD. A partir de 2019, también se obligará a pasar dicho reconocimiento a deportistas de selecciones navarras.
El reconocimiento médico previo a la práctica deportiva NO es obligatorio en la mayoría de las Federaciones Deportivas. Algunas excepciones son, por ejemplo, las Federaciones de Fútbol, Baloncesto y Balonmano.
No se sabe con seguridad cada cuánto tiempo es conveniente repetir el reconocimiento médico previo a la práctica deportiva. Generalmente se considera que los deportistas de alto nivel de exigencia es conveniente que lo pasen cada 1 a 2 años, mientras que los de menor nivel deportivo y exigencia podrían pasarlo cada en un plazo de tiempo más largo (cada 3 a 5 años).